martes, 23 de abril de 2013

Juego 14. ¿Dónde está este Sant Jordi?


No hace falta que las leyendas sean ciertas, tan solo hace falta que sean bonitas.
 
 
Dice la leyenda de Sant Jordi que hace mucho, mucho tiempo, había un dragón monstruoso, con largas uñas y aliento de fuego. Este dragón hacía huir al pueblo, mataba a la gente con su aliento y se tragaba vivas a las personas.
 
Los aldeanos, sin otra solución, decidieron darle dos ovejas a diario para apaciguar su hambre.
 
Cuando terminaron con las ovejas, le dieron vacas, bueyes y todos los animales que tenían, hasta que se quedaron con ninguno.
 
El rey convocó una reunión, donde decidieron que harían un sorteo y le darían al dragón una persona cada día, para que se la comiese.
 
Un desafortunado día, le tocó a la hija del rey, y él, entre lágrimas dijo:
-Perdonad a mi hija y, a cambio, os daré todo mi oro, mi argento y la mitad de mi reinado, pero os los pido por favor, dejad a mi hija.
 
Pero el pueblo se lo negó. Llegado el día, el rey la vistió y la dejó delante de la cueva, cerca del dragón.
 
Y de repente, cuando el dragón ya abría su gran boca para comerse de un mordisco a la princesa, apareció, cabalgando sobre un caballo blanco y con su lanza y su escudo dorado el caballero Sant Jordi, para salvar a la princesa de las garras de aquel enorme dragón.
 
Aquel caballero alzó su larga lanza y de un golpe, el dragón cayó desplomado al suelo, con la lanza clavada en el centro del corazón.
 
De repente, de la sangre del dragón que le brotaba cuerpo abajo salió un rosal, con unas rosas que brillaban con el esplendor del sol, y el caballero Sant Jordi cogió una, la más bonita de todas, se dirigió a la princesa y se la dio en señal de amor.
 
El rey le pidió que se casara con su hija y que le daría todo su oro y la mitad de su reinado. Pero el caballero se marcho sobre su caballo blanco sin decir nada.
 
 
No se sabe con certeza cuándo se empezaron a regalar rosas el día de Sant Jordi. Probablemente el origen de la Fira esté en las ofrendas florales que los romanos hacían en mayo a la diosa Flora. La rosa roja simboliza la pasión, y la espiga que a veces la acompaña, la fertilidad. La rosa se unió a Sant Jordi, y hoy en día perdura la costumbre de regalar una rosa con una espiga. Y además, un libro.
 
 
Si no sabes dónde está el Sant Jordi de la foto clica aquí o busca en la etiqueta Soluciones juegos.
 

2 comentarios:

  1. Esta en la fachada del Palau de la Generalitat, Plaça Sant Jaume.

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    1. Muy bien Mari!!! Y tiene mérito por lo poco que hace que vives aquí. Besos. Mónica

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