domingo, 27 de enero de 2013

Recinto del Forum (I)







El Parque del Fórum es un parque público situado entre la ciudad de Barcelona y San Adrián del Besós. Se encuentra en el cruce entre la Avenida Diagonal, la calle Taulat y la Rambla Prim.

 
 
Cercano a la desembocadura del río Besós, se sitúa en terrenos ganados al mar, en un área construida y remodelada en profundidad especialmente para la celebración del Fórum Universal de las Culturas 2004.

 
El Fórum cuenta con una inmensa plaza de casi 9.000 m2.

 

Es el resultado de la cobertura de la planta depuradora existente en la zona. Dispone de tomas de servicios y de una red de fibra óptica que permite la celebración de actos de gran formato y montajes como ferias o festivales de música en los que la afluencia del público es masiva. Por todo ello fue galardonada con el premio al mejor Hiper-Proyecto en la Bienal de arquitectura de Venecia.

 
 
A menudo, se ha calificado este espacio de frío, por su magnitud y por la imposibilidad de plantar vegetación en la explanada, debido a la depuradora del subsuelo. Sin embargo, por inusual, es mucho más interesante de lo que cabe esperar,  con la arquitectura como protagonista.




En uno de los extremos de la explanada destaca la gran placa solar fotovoltaica. Con una superficie aproximada de 1.700 m², inclinada y suspendida sobre un bosque de columnas, se ha convertido en uno de los iconos de la ciudad, símbolo de su compromiso con la preservación del medio ambiente.



 
 
La plaza también se ofrece la posibilidad de acotar zonas si se busca conseguir espacios más intimistas dentro de la misma explanada o aprovechando las estructuras existentes.

 
Bosque de columnas: ocupa una superficie de más de 15.000 m², donde se pueden crear diferentes ambientes para todo tipo de actos. Actualmente podemos encontrar en este espacio el Bosc urbà (Bosque urbano), un centro de aventuras con tirolinas, redes y puentes colgados de los pilares.

 
 
Parque de los Auditorios. Comprende un gran espacio de más de 12.000 m² al aire libre. Diseñado por el arquitecto español Alejandro Zaera, aprovecha el desnivel que hay entre la plaza y el mar para generar un sistema de dunas artificiales donde se integran dos auditorios al aire libre.

 
 
El Auditorio Grande sirve de escenario natural para grandes conciertos al aire libre así como otro tipo de actos, aprovechando sus gradas fijas con capacidad para 3.500 personas. El Auditorio Pequeño tiene capacidad para 1.500 personas.

 
 
 
Acercándonos al mar, encontramos la zona de baños, formada por diversas piscinas de agua del mar, sin arena.


Las aguas están controladas y son poco profundas.


 




 
Junto a la zona de baños y bajo la placa fotovoltaica podemos encontrar una zona de juegos infantil, envuelta en una estructura muy especial.





De momento lo dejo aquí, en una próxima entrada seguiremos recorriendo la zona, que guarda más sorpresas arquitectónicas.

 

viernes, 18 de enero de 2013

Jardines de Joan Maragall y Palacete Albéniz (II)

 
 

Estos jardines tienen su origen en los que diseñó Jean Claude Nicolas Forestier.
En 1970 se ampliaron por Joaquim M. Casamor, y pasaron a llamarse de Joan Maragall.
 


En la entrada de la semana pasada comentaba que el lugar está decorado por 32 esculturas que separan los distintos ambientes. La mayoría son modernistas y representan mujeres desnudas en actitudes cotidianas. Os las iré enseñando a la vez que descubrimos rincones de los jardines.
 
Nada más entrar en el parque nos recibe Noia ajaguda, chica acostada (1950), de Joan Rebull.
 

Si levantamos la vista, un poco más allá, podemos ver Nu femení, desnudo femenino (1965), de Eulàlia Fàbregas de Sentmenat.


De la misma escultora son los dos desnudos llamados Dona a la cascada, mujer en la cascada (1970). Los surtidores y saltos de agua de los jardines fueron diseñados por Joaquín Casamor.
 
 
 
 


 
Justo detrás, en un pequeño templete, tenemos a Susana al bany, Susana en el baño (1896), de Teòfil Eugeni Víctor Barrau.
 
 
 
A poca distancia, entre el cesped, aparece la Al.legoria a la sardana, Alegoría a la sardana (1965), de Ernest Maragall.
 
 
Noia amb casquet de bany, Chica con gorro de baño (1970), de Marifé Tey.
 
 
Otra Dona ajaguda, Mujer acostada (1970), pero ésta es obra de Enric Monjo.
 


 
L'aiguadora,  La aguadora (1862) de Louis Sauregeau.
 
Una de mis favoritas,  Nu a l'estany,  Desnudo en el estanque (1970), de Antoni Casamor.



 
Serena (1970), de Pilar Francesch Ventalló. Serena está situada en una plaza semicircular rodeada de cipreses, antesala de un pequeño anfiteatro.




En la zona situada al lado del Palacio Nacional, donde se encuentra la entrada principal aunque cerrada al público, podemos encontrar una gran avenida de magnolias con un estanque con surtidores cuya agua discurre por una zona  escalonada hasta una fuente con figuras infantiles.

 


 
Sin duda una de las épocas más bonitas para el ver el parque es la primavera, ya que en ese momento está lleno de flores. No obstante, como habéis podido comprobar, en otoño también tiene su encanto.

 

sábado, 12 de enero de 2013

Jardines de Joan Maragall y Palacete Albéniz (I)



Uno de los rincones más hermosos de Barcelona y curiosamente menos conocidos son los Jardines de Joan Maragall.
 


Es un jardín elegante y afrancesado,  construido para un rey y abierto los fines de semana para que los barceloneses se alejen por unos momentos del ruido de la ciudad paseando por verdes prados, entre grandes árboles y variada vegetación, viendo y oyendo surtidores y saltos de agua que emanan de estanques y fuentes.



Está situado en  Montjuic, tiene la entrada  en la Avenida Estadi 65-69 y por detrás puede verse el Palau Nacional. Los jardines están abiertos únicamente sábados, domingos y festivos de 10 a 15h.
 

Aquí se encuentra el palacete Albéniz, construido para la Exposición Internacional de Barcelona de 1929 como residencia oficial del rey Alfonso XIII.  
 


Las esculturas que encontramos a la entrada del Palacete, representando dos leones, proceden del Palacio de Pedralbes.

 

Una vez finalizada la exposición, se pensó en ubicar aquí el Museo de Música de la ciudad, un proyecto que no prosperó pero que sí determinó el nombre con el que se conoce el palacete: Albéniz, en honor al músico.
 


El palacio tiene inspiración neoclásica, obra del  arquitecto Joan Moya, con bastante parecido a palacetes madrileños para simbolizar su uso por los borbones.

 
En la actualidad, es la residencia oficial de los reyes cuando visitan Barcelona, además de ser lugar de acogida y recepción de visitantes ilustres de Barcelona y escenario de actos de protocolo del Ayuntamiento.



Desde aquí pueden verse unas buenas vistas de la ciudad.
 

Delante de la fachada principal del palacete se extiende una explanada flanqueada por dos amplias escalinatas y un estanque con surtidores, esculturas y cascadas. Enfrente, un delicado parterre con pequeñas vallas vegetales que dibujan espacios llenos de flores. En el fondo, como final a la perspectiva, otro estanque y una zona de césped que asciende suavemente destacando la peana de un templete.


 

El palacio no se puede visitar, aunque excepcionalmente por la Mercè se abren sus puertas para enseñar algunas de las estancias. Eso sí, quien quiera verlo se ha de cargar de paciencia y hacer horas de cola. Yo fui una vez y no la tuve, así que está en el cajón de “cosas pendientes”.


 

En la fuente situada frente al Palacio encontramos dos esculturas: Mujer con niña y Mujer con niño (1970) de Luisa Granero.
 




 
 





Aunque al Palacio no podamos entrar, de lo que sí podemos es disfrutar es de los diferentes espacios de los jardines, que esconden hasta 32 esculturas que decoran el lugar. En una próxima entrada os mostraré algunas de las más representativas, aunque aquí os dejaré una pequeña muestra de las más cercanas al Palacete.
 
 


Para terminar, mostraré dos fuentes con un tritón cada una de ellas (1929), obra de Josep Viladomat, y situados en fachadas opuestas del Palacio.